Una roca hunde un poco más al Alavés: el Getafe se lleva tres puntos de oro en Mendizorroza
El partido en Mendizorroza mostró el sello característico de José Bordalás. Con un planteamiento ultra defensivo, el Getafe salió al campo con hasta seis defensas en su alineación, ajustándose a las bajas en el equipo. El técnico alicantino no solo buscó bloquear el ataque del Alavés, sino también aprovechar cualquier error para sacar petróleo.
El momento clave llegó en el minuto 44, cuando un salto de Abqar con los brazos abiertos provocó un penalti que el árbitro, Díaz de Mera, no dudó en señalar. Arambarri transformó la pena máxima con un disparo potente que terminó siendo el único gol del encuentro.
David Soria, el muro del Getafe
El Alavés lo intentó por todos los medios, especialmente en la segunda mitad, pero se encontró con un David Soria en estado de gracia. A pesar de jugar parte del encuentro sin máscara, tras quitársela por incomodidad, el portero madrileño realizó cuatro paradas clave, incluyendo un remate a bocajarro de Carlos Vicente y una gran estirada en el tramo final.
Además, el larguero evitó otro intento del Alavés, que no logró romper la sólida defensa azulona, la segunda menos goleada de LaLiga.
El Alavés, sin soluciones en ataque
El equipo de Eduardo Coudet no gana en casa desde el 1 de noviembre y comienza a sentir la presión del descenso. A pesar de terminar el partido con todo su arsenal ofensivo, incluyendo a Kike García, Pau Cabanes y Villalibre, los locales mostraron falta de acierto en los últimos metros y continúan sin encontrar el camino a la victoria.
Un Getafe en modo supervivencia
Con esta victoria, el Getafe se aleja de los puestos de descenso y consolida su reputación como un equipo difícil de superar. Bordalás, una vez más, ha sacado el máximo rendimiento de un conjunto que se distingue por su solidez defensiva y su efectividad en momentos clave.