Las consecuencias históricas que podría tener la guerra contra el tenis
La PTPA ha declarado la guerra contra ATP, WTA, ITF e ITIA para denunciar las prácticas abusivas de las organizaciones
La pista Philippe Chatrier, en París / EFE
Alguer Tulleuda Bonifacio
21 MAR 2025 16:35
La guerra en el mundo del tenis ya ha empezado. El pasado martes, la Asociación de Jugadores de Tenis Profesionales (PTPA) anunció que arrancaba una batalla legal contra los actuales organismos que rigen el tenis mundial –ATP, WTA, ITF e ITIA– para denunciar sus prácticas abusivas contra los tenistas profesionales. Con términos realmente duros calificándolos incluso de ‘cártel’, este sindicado fundado en 2019 por Novak Djokovic ha prometido arreglar el mundo del tenis para siempre…
Son muchos los puntos que reclama la PTPA, entre los cuales se encuentran el reparto monetario de los torneos, el sistema de puntos o el calendario abusivo de competiciones; sin embargo, el litigio parece que va para largo y podría tener consecuencias catastróficas para los organizadores del tenis mundial actual.
Es la noticia de la semana en el mundo del tenis. La PTPA, un sindicato creado en 2019 por Novak Djokovic -entre otros- desmarcado de la ATP, emitió un comunicado donde anunciaba el inicio de una batalla legal contra los organismos rectores del tenis mundial actual. Respaldados por un grupo de prestigiosos abogados, la denuncia se maneja en cifras multimillonarias que podría tener consecuencias irremediables para todos los tenistas.
Las exigencias de la PTPA
¿Qué reclama la PTPA en su guerra contra el tenis? Son muchos los aspectos que se pueden extraer del duro comunicado contra las asociaciones, aunque se puede resumir en unos pocos. Uno de los principales es el desigual reparto de premios monetarios a los jugadores en los torneos. Según cifras que desvela el periodista José Morón, los Grand Slam –supervisados por la ITF– reparten entre el 13-17% de sus beneficios y los torneos ATP –Masters 1000, ATP 500, ATP 250 y Tour Masters– en torno al 30-35%. Los tenistas llevan tiempo reclamando unos mayores beneficios por ser los protagonistas de los torneos, aunque desde los actuales organismos se desoyen sus demandas y su desinterés ha llevado a la PTPA a elevar sus quejas.
Otro de los puntos que reclaman es la confección actual del calendario, demasiado cargado de torneos y con la obligatoriedad de jugar en ellos para poder estar arriba en el ránking. La creciente cantidad de partidos que deben disputar eleva el riesgo de lesiones y reduce el espectáculo en pista, condicionado por el estado físico de unos jugadores cada vez más exigidos.
La demanda de la PTPA está fundamentada en aspectos que los tenistas llevan exigiendo desde hace años, aunque cuenta con el problema de no contar con el apoyo de la mayoría… ni tampoco de los mejores del circuito. Así de claro lo ha dejado Alcaraz al ser preguntado por la histórica demanda: «Hay algunas cosas con las que estoy de acuerdo, otras con las que no. Pero lo principal es que no lo estoy apoyando, eso es todo». Y es que a pesar de alegar que cuentan con el respaldo de la mayor parte de los tenistas, esta afirmación no es del todo cierta ni está, por ahora, cerca de serlo.
Las consecuencias legales
La ruptura amenaza en el mundo del tenis con producirse; el bando de jugadores en contra de ATP, WTA, ITF e ITIA no cesarán en sus demandas, mientras que el resto pueden sentirse utilizados a favor de la voluntad de la PTPA reciclando exigencias de los tenistas en pos de sus demandas. El clima de incertidumbre es mayoritario y no son pocos los tenistas que se enteraron al momento de la demanda de la PTPA contra los organismos rectores.
Novak Djokovic, en el Open de Australia. / Associated Press/LaPresse. LAP
Las acciones legales podrían ir más allá; como bien recuerda el medio ‘Punto de Break’, la ATP es una organización sin ánimo de lucro y si deben defenderse del poderoso ataque de la PTPA deberán hacer uso de fondos que reciben los jugadores y los torneos. Las consecuencias son evidentes: los torneos podrían bajar su reparto de dinero por premios y los patrocinadores podrían no estar tan interesados en acudir a competiciones organizadas por la ATP. En resumen, menos dinero para los tenistas.
A pesar de las consecuencias que podría tener en un corto plazo, es evidente que desde la PTPA confían en un futuro a largo plazo donde los organismos atiendan a las demandas de los tenistas. El primer paso, sin embargo, es organizar un frente común y contar con el apoyo –esta vez real y no infundado– de la gran base de los jugadores del circuito. La guerra en el mundo del tenis está abierta.