Decepcionante empate en el último derbi cántabro del curso
Ni el Rayo Cantabria ni el Escobedo salieron satisfechos con la igualada entre ambos de La Planchada, donde se disputó el último derbi cántabro de la temporada de Segunda Federación (0-0). El filial racinguista continúa por la zona media de la clasificación, y el Escobedo abriendo los puestos de descenso a Tercera División, desaprovechando pues el empate del Llanera, sexto por la cola.
El encuentro comenzó con bastante ritmo. El Rayo Cantabria protagonizó la primera amenaza mediante una acción de estrategia a los cuatro minutos: Ángel Pérez ejecutó un saque de esquina raso hacia el primer palo para la llegada por sorpresa del juvenil Salinas, cuyo lanzamiento, algo mordido, fue atrapado por Laro.
La mejor ocasión visitante se produjo hacia el cuarto de hora, como consecuencia de una indecisión de la zaga rayista en el área al despejar un balón, que recuperó Jay Romero, y Edu Fontán disparó a la media vuelta, desviando el portero Álvaro Jiménez con bastantes apuros.
El local Quicala, muy destacado, filtró un gran pase desde el costado izquierdo hacia el interior del área para Salinas, que, después de regatear a su par, intentó superar de disparo cruzado a Laro, el cual desvió el peligro con el pie.
Tres minutos después, el propio Quicala partió de campo propio, recorrió casi toda la banda izquierda y sirvió en profundidad al delantero Baldrich, el cual cruzó demasiado su disparo dentro del área ante la presencia de Laro. La última acción de peligro del primer tiempo fue un libre directo demasiado alto a cargo del visitante Espinosa desde la media luna.
La segunda parte registró un ritmo más lento y tuvo menos acciones claras de peligro. La batería de sustituciones favoreció el plan de contención del entrenador visitante, Samuel San José.
Lo más relevante para romper las tablas iniciales se produjo casi al límite del tiempo reglamentario. El revulsivo Fuentes, sustituto de Quicala desde el minuto 71, filtró un gran pase entre líneas para dejar a Ángel Pérez mano a mano ante Laro, que pudo desviar con las piernas el potente aunque demasiado centrado lanzamiento del jugador aragonés, lo que mantuvo el guarismo inicial en La Planchada.
El Rayo Cantabria repetirá de local en la próxima jornada midiéndose al segundo clasificado, el Numancia, mientras que el Escobedo, quinto por la cola, tendrá un duelo directo por la salvación contra el Guijuelo en el Eusebio Arce.