Baloncesto | Las confesiones de Kevin Punter y su relación especial con el Barça
La estrella azulgrana se siente feliz en Barcelona y su idea es jugar más años en el club blaugrana donde ha encontrado la estabilidad personal y emocional que necesitaba
Kevin Punter habla de su infancia en el Bronx y sus primeros pasos en el baloncesto
Kevin Punter hizo un repaso de su vida en una entrevista a los medios del club / FC BARCELONA
Ramon Palomar
25 FEB 2025 17:31 Actualizada 25 FEB 2025 17:41
Kevin Punter, un tipo nacido y criado en el Bronx neoyorquino, ha tenido que forjar su carrera en Europa, dando saltos a diferentes equipos hasta que se le cruzó en su camino el Barça. A punto estuvo de venir el año pasado aunque el técnico del Partizan, Obradovic, le convenció de seguir.
Pero esta temporada, decidió dar el ‘sí’ al conjunto azulgrana y está demostrando una integración total en el club y la ciudad. En una entrevista concedida a ‘Barça One’, el escolta asegura que su vinculación con el club azulgrana puede ir más allá del año firmado hasta junio próximo.
“Me gustaría quedarme aquí unos años más”, asegura categórico el estadounidense, feliz de cómo le van las cosas en el club, a la espera de restablecerse de su lesión en el hombro que le impedirá jugar este jueves ante el Madrid, aunque se espera que esté en condiciones de regresar la próxima semana.
La estrella azulgrana reconoce que estuvo a punto de tirar la toalla antes de venir a Europa / FCB/VICTOR SALGADO
El Barça, un destino forjado con el trabajo
“La llamada del Barça fue como una forma de mirar atrás”, explicaba. “Empecé en Lavrio, en Grecia y ahora juego en el Barça. Es una demostración de todo el trabajo que he hecho, todo el esfuerzo verano tras verano, temporada tras temporada, no ha pasado desapercibido”, decía.
“Se trata de seguir trabajando. Es lo más importante para mi y siempre estoy intentando mejorar. No soy una persona complaciente”, dice. “Me encanta Barcelona y su clima. Es inmaculado. En Nueva York siempre hace frío, aunque Barcelona también me recuerda a Nueva York porque siempre hay gente en todas partes”, explica.
El estadounidense asegura que ha encontrado la felicidad de blaugrana / JAVI FERRANDIZ
“Todo está genial para mi y me gustaría quedarme aquí unos años más. Lo he pensado y me he hecho ciertas preguntas, Así que sí, seguro, al cien por cien”, decía en la entrevista a los medios del cub.
Más estable que nunca en el Barça
Reconoce que venir al Barça le ha dado una estabilidad que aprecia mucho. “Estoy en un momento de mi carrera en la que estoy tranquilo. Me puedo centrar en mis objetivos y estar mejor todos los días. Dejo pasar ciertas cosas que antes no dejaba pasar”, explicaba.
Lejos queda la etapa en la que no sabía hacia dónde caminaba su carrera y reconoce que estuvo a punto de tirar la toalla. “Estaba a punto de rendirme y mi agente me propuso ir al extranjero. Y yo le respondí que no iba a ninguna parte de Europa. Yo no sabía nada del baloncesto europeo, cero”, recuerda.
El jugador, entrevistado por Barça One durante el parón de selecciones / FCB/ VICTOR SALGADO
“Era volver a realizar un cambio de rumbo. El baloncesto te coloca y te desafía en diferentes situaciones que nunca imagnarías. Es una locura”, dice. Recuerda que “no tenía dinero y mi agente me ofrecía 40.000 euros. La otra opción era ir a la G League, pero la oferta era inferior”.
Europa, un mundo nuevo
Así que tomó un avión y se encontró un mundo nuevo. “Todo era distinto. Cuando estaba solo en el hotel, pensé en volver. Jugar a baloncesto fue lo que me hizo resistir”, y con la mente de volver siempre a la NBA.
“Hasta la séptima temporada en Europa, en verano siempre estaba pensando constantemente en como ir a la NBA. No había hecho las paces con el tema”, recuerda.
Llegar al Barça, asegura que ha sido la culminación a todo el trabajo en su periplo europeo / EFE
Punter siempre tiene en la mente uno de los jugadores que han marcado la historia de la liga estadounidense. “Crecí viendo mucho a Kobe, con el número ocho. Era cuando los Blazers y Pacers eran buenos. Siempre quise ir a la NBA”.
Una carrera llena de obstáculos
Reconoce que “no siempre fui el mejor jugador mientras crecía. Era un niño que debía seguir trabajando en mi juego, y cuando llegué al Instituto, me di cuenta de que era bastante bueno”. Aunque reconoce que no ser bueno en los estudios, fue un impedimento para acceder a buenas opciones universitarias.
“Recibí muchas llamadas que me ofrecían becas pero mis notas no eran buenas y me rechazaban una y otra vez, llamé a casa llorando y estaba a punto de volver al Bronx, mi barrio de toda la vida y hacer otras cosas”. Aunque su madre le animó a que no claudicara de su sueño. “Tras hablar con ella, y tras calmarme, le dije que “aún puedo hacerlo, sigamos adelante”.
Su carrera ha vivido momentos complicados, aunque asegura que el Barça le ha dado estabilidad / VALENTI ENRICH
Sus buenos números, con 22 puntos de media, parecían acercarle a la NBA. “Mi agente, hasta el día de hoy, me dijo que posiblemente podía estar en las últimas posiciones de la primera ronda y algunos equipos se estaban interesando”. Aunque una lesión le devolvió a la realidad. “Muchas veces pienso lo que hubiera pasado si no me hubiera lesionado. En ese momento supe que mi carrera había terminado”.
El Bronx y su abuela siempre están presentes
“Tuve la suerte de crecer con mi madre, mi padre y mi hermano pequeño. Siempre le digo a mi madre que tuvimos la suerte de tener a los dos padres porque, en el entorno en que crecí y ves las cosas que ves, es realmente importante tenerlos. Si sólo tienes a mamá, te falta una figura paterna”, recordaba.
“Mi relación con Bronx es inexplicable. Es difícil ponerlo en palabras porque soy de ahí. Es donde empecé a jugar al baloncesto. Mi tía y mi abuela todavía viven allí. Me encanta y quiero al Bronx”, dice. «El baloncesto y mis padres me mantuvieron alejado de hacer otras muchas cosas que también pasaban justo delante de mi cara”, dice. «Tengo tatuada la cara de mi hermano pequeño, de mi padre, de mi abuela y de mi madre. Mi familia siempre está conmigo”.
Punter hizo un repaso de su vida, empezando por el Bronx hasta la actualidad, en Barça One / FCB/ VICTOR SALGADO
“Esta es mi novena temporada como profesional en Europa y ésta es la primera vez que hablo con mi abuela cada día. Es una locura, hablo con ella todos los días, me envía mensajes de texto y emoticonos. Simplemente desea asegurarse de que estoy bien. Me envía una pequeña oración diaria y hablamos de pequeñas cosas”.
“A veces echo de menos a mi familia, pero estoy a una llamada de distancia. Mi familia sabe que tengo que hacer lo que estoy haciendo y puedo echar de menos pequeñas cosas, pero no lo cambiaría por nada. Jugar en el extranjero me salva de muchas cosas”, finalizó.